Adquisición de nacionalidades y residencias en la Unión Europea

“Civis Romanus sum!” dijeron en su momento los orgullosos romanos, refiriéndose a sus privilegios especiales en comparación con otros que no eran “ciudadanos de Roma”. Ya que el patrimonio romano siempre dependía del dinero fresco, ya entonces los extranjeros ricos podían comprar la ciudadanía romana. Incluso hoy en día el comercio con nacionalidades y pasaportes es popular. Y no sólo por parte de los estados insulares como Antigua, Vanuatu y Grenada, sino también por parte de algunos estados europeos como Austria, Malta y Chipre.

Golden Visa

Aunque otros países europeos no conceden la nacionalidad, “venden” permisos de residencia de calidad variable a los solicitantes a cambio de dinero en efectivo. También en España: Según una ley que entró en vigor el 29 de septiembre de 2013, los ciudadanos no comunitarios tienen derecho a obtener el denominado “visado de inversor” si pueden demostrar que han adquirido bienes inmuebles en España por un importe mínimo de 500.000 euros o que adquieren acciones o participaciones empresariales de sociedades españolas por valor de 1 millón de euros o que poseen bonos españoles por valor de 2 millones de euros. La adquisición de un permiso de residencia está sujeta a otras condiciones: por ejemplo, no tener antecedentes penales en España y en el país de origen, prueba de las fuentes del capital invertido, posesión de un seguro médico privado o público con validez en España y similar. Ya que estas condiciones no son particularmente “morbosas” en comparación con las de otros países europeos, el número de solicitantes es manejable. En las Islas Baleares, desde 2013 sólo se han solicitado “Golden Visa”, como también se denomina esta forma de permiso de residencia.

Desde el principio, los Golden Visa han sido objeto de debate: la Comisión Europea y la Organisiation Transparency International opinan que los Golden Visa promueven el lavado de dinero y la corrupción y que son perjudiciales para la seguridad de la Comunidad Europea.

El Gobierno Español y el Parlamento Balear están actualmente discutiendo la abolición de esta forma especial de permiso de residencia.